Por la Fecha 5 del Torneo Proyección, Vélez cayó en la Villa Olímpica ante Independiente. Mirko Díaz marcó el gol del conjunto visitante en el inicio del complemento, y pocos minutos después se fue expulsado Mirko Bruno en Vélez.
Bronca, fastidio y muy poca fortuna. Ese es el sentimiento de esta Reserva al haber cumplido su quinto partido sin conocer la victoria. Justamente este grupo y cuerpo técnico, que del triunfo hicieron un hábito y de ahí llegaron los títulos que se volvieron costumbre.
Cuesta creerlo, pero así también es el fútbol. Incluso en una formación que va sumando nuevos jóvenes que precisan el lógico rodaje. Hoy ante Independiente quedó en claro que ciertas rachas son ineludibles, como la actual: Vélez llega reiteradas veces con peligro y no convierte. El presente se debate entre impericia y falta de suerte.
El partido de esta tarde tuvo momentos de alto vuelo, donde El Fortín buscó siempre ser protagonista. Así se desenvolvió en la primera etapa, moviendo la pelota con criterio a través de Bautista Ramírez y Raúl Cabral. En la chance más clara, un despeje del defensor rival Gonzalo Bordón rebotó en la pierna derecha de Fran Pozzo y el balón se estrelló en el travesaño. Casi una carambola para abrir el marcador.
Lucas Lavagnino, arquero del Rojo, fue la gran figura de la tarde. Se quedó con dos muy buenas respuestas ante disparos de Ramírez y Cabral en la primera etapa, y en el complemento volvió a ahogarle el grito al "Bocha" con una tapada sensacional. Más tarde, con los pies, desbarató otro remate de Aaron Centurión. Vélez chocó una y otra vez contra la muralla que custodiaba los tres postes de Independiente.
El partido se abrió a los 8 minutos del complemento. Mirko Díaz recibió solo a cinco metros del área fortinera y sacó un zurdazo bajo, rasante, imposible para Álvaro Busso. Había que remar de atrás y, para colmo, otro Mirko -el capitán velezano- se fue expulsado por doble amarilla.
Con diez hombres, se hizo cuesta arriba el segundo tiempo. Pierna fuerte, pocos espacios y dominio territorial en campo visitante. Cuando no era Lavagnino el que cerraba su arco, era la defensa de Independiente despejando todo. Sin dudas, no era la tarde del campeón defensor del título.
Después de un año, la Reserva perdió en la Villa Olímpica. River había sido el verdugo el 1° de agosto de 2024 (0-1). Y la anterior caída como local se remonta mucho más atrás: también en agosto, pero de 2022, casualmente ante Independiente y por el mismo resultado.
Desde hace un buen tiempo a esta parte, la Reserva de Vélez es sinónimo de equipazo. Ahora afronta un nuevo momento de recambio y magros resultados. Será cuestión de seguir trabajando y buscar la victoria, algo que Marcelo Bravo y sus dirigidos conocen de memoria.
¡Vamos, Campeón!
